Aunque a priori, podríamos pensar que el trabajar con varios bancos nos perjudica por los gastos de las comisiones, y la organización de pagos que se pasan por cada uno de ellos, yo creo que es mejor tener varios.
¿Por qué varios?
Durante los primeros años con mi empresa, sólo teníamos un banco, y nos veíamos limitados a las condiciones de ese banco. Por eso, tomamos la decisión de valorar otras opciones.
En cuanto abrimos otra cuenta en otro banco, las cosas fluyeron de mejor manera. Podíamos elegir qué operación realizar en cada entidad. Teníamos datos del otro banco, por lo que ante nuestra oficina de siempre, nos encontrábamos en disposición de negociar mejores condiciones.
Como cualquier otra empresa, no todos los bancos son iguales, y cada uno tiene sus propias condiciones, y sus propios intereses. Suele ocurrir, que cada entidad se especializa en un producto determinado, para captar a una clientela específica.
Y es ahí, donde tu puedes elegir, qué producto te interesa de cada entidad. Si lo que quieres es ahorrar, puedes buscar aquella que te ofrece un mejor rendimiento. O si lo quieres para la operativa normal, quizás alguna entidad te ofrece mejores condiciones por tener el autónomo domiciliado. Es cuestión que valores quién te ofrece las mejores condiciones para cubrir tus necesidades.
Claves a tener en cuenta
- Comprueba las comisiones de cada entidad y compáralas con las ventajas y el rendimiento económico que puedas conseguir.
- Hazte un presupuesto de tesorería anual y otro a corto plazo, por ejemplo mensual, para que tengas controlado cada cuenta, con sus entradas y salidas, y no se te escape nada. Aquí te explico cómo puedes crear tu propia plantilla en Excel para hacer el presupuesto anual.
- Separa las cuentas bancarias del negocio, de la personal. De esa manera podrás controlar mejor todos los movimientos.
¿Y tú cuántas cuentas bancarias tienes? Si compartes tu experiencia, será muy enriquecedor para todos. Me encantará leerte.